Estado previo

Se trata de una terraza en un ático en la ciudad de San Sebastián. Orientación noreste y con vistas al mar. Es un rectángulo de 10m x 2,5m, con una tarima técnica de color oscuro, al igual que las jardineras (8) y la mesa y sillas de uno de los extremos.

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Requerimientos

Puesto que las jardineras ya estaban dispuestas y el suelo recién colocado, en este caso me pidieron asesoría para el tema vegetal. La propietaria quería una terraza verde y que le diera cierta intimidad con respecto al vecino.

Una terraza siempreverde

Todas las especies elegidas son adecuadas para situaciones próximas al mar (salvo Convallaria majalis, pero es tan bonita que creí que merecía la pena intentarlo. Además le aporta un toque delicado a la composición de las jardineras con bambú).

Para crear el efecto «verde permanente» hay que tener una vegetación continua. Y dado que quedan huecos entre las jardineras ya existentes la única solución es crear este telón verde con plantas trepadoras. En este caso tres ejemplares de Hedera helix y uno de Passiflora caerulea.

Casi todas las especies que van en las jardineras son perennifolias. Los cambios estacionales serán visibles sobre todo en las floraciones de algunos de los ejemplares. En la pared de la ventana y la puerta creí oportuno introducir una especie que destacara cuando las demás aún no hubieran empezado a dar señales de floración. El lilo (Syringa vulgaris) anunciará la primavera y dará un toque de color a la terraza cuando el resto sea sólo verde. En verano se invertirán los papeles.

La composición de las seis jardineras del muro de la barandilla se basa en la sucesión de ritmos y repeticiones (Buxus sempervirens y Philadelphus coronarius) rotas con algún elemento que actúa como contrapunto (Agapanthus africanus) o con asimetrías en la colocación de las plantas rastreras (Myoporum y Muehlenbeckia).